Thich Nhat Hanh: 10 Frases de paz
El monje budista Thich Nhat Hanh, uno de los activistas por la paz más influyentes y reconocido como el mayor divulgador de la práctica del mindfulness en Occidente, ha fallecido este pasado sábado 22 de enero en Vietnam a los 95 años.
Thich Nhat Hanh fue propuesto como candidato a Nobel de la Paz por el mismísimo Martin Luther King con quien tuvo una estrecha relación. Sufrió cuatro décadas en el exilio por su oposición a la guerra de Vietnam, que le granjeó la enemistad de los dos bandos. Pero Thich Nhat Hanh supo sacar partido a su exilio y se puso como meta lograr la paz propagando el mindfulness (versión «laica» de sus orígenes budistas) a occidente.
¿Quién fue Thich Nhat Hanh?
Nación en 1926 y a los 16 años entró en un monasterio budista de Vietnam Central, siendo ordenado monje en 1949. En 1960, Thich Nhat Hanh fue a Estados Unidos a estudiar religiones comparadas en la Universidad de Princeton, siendo nombrado después profesor de budismo en la Universidad de Columbia.
En 1963, regresó a Vietnam para ayudar a sus seguidores en sus acciones no violentas a favor de la paz. Nhat Hanh enseñó psicología budista y literatura en la Universidad Budista Van Hanh. En el transcurso de una reunión en abril de 1965, participó en el manifiesto «Una llamada a la paz».
Nhat Hanh regresó a Estados Unidos para liderar un simposio sobre budismo vietnamita en la Universidad de Cornell y continuar su trabajo a favor de la paz. Había escrito una carta a Martin Luther King, Jr. en 1965 titulada «En busca del enemigo del hombre». Fue durante su estancia en 1966 en Estados Unidos cuando Thich Nhat Hanh se reunió con Martin Luther King, Jr. y le urgió a denunciar públicamente la guerra de Vietnam.
En 1967, el Dr. Martin Luther King dio un famoso discurso en Nueva York, su primer cuestionamiento público a la implicación de Estados Unidos en Vietnam. Después de este año, el Dr. King nominó a Thich Nhat Hanh para el Premio Nobel de la Paz de 1967 y dijo: «No conozco personalmente a nadie que merezca más (este premio) que este amable monje vietnamita. Sus ideas para la paz, si se aplicasen, levantarían un monumento al ecumenismo, a la fraternidad universal, a la humanidad». Al revelar a quién había nominado, violaba las tradiciones y protocolo del Nobel. Por eso no le dieron el Nobel.
Su mensaje está en la meditación
Tengo que reconocer que no soy una persona muy religiosa pero la primera vez que leí una frase de Thich Nhat Hanh me picó la curiosidad por leer más ya que era capaz de condensar una increíble sabiduría en muy pocas palabras. Eso me llevó a aprender a meditar con su pequeño y grandioso librito «Hacia la Paz interior» pero realmente todos sus libros son un maravilloso regalo de sabiduría. También son un excelente regalo para esa persona de tu entorno que necesita encontrar la paz o calmar su sufrimiento, del tipo que sea.
Si estás leyendo desde fuera de España o en Estados Unidos y quieres buscarlos desde Amazon.com éstos son los enlaces. Cualquiera de ellos será para siempre un tesoro en tu mesilla de noche:
Thich Naht Hanh: Frases de «El milagro de Mindfulness»
- La felicidad y el sufrimiento son estados mentales y, por lo tanto, sus causas principales no existen fuera de la mente misma. Si queremos ser verdaderamente felices y liberarnos del sufrimiento, debemos aprender a controlar nuestra mente.
2. La meditación no es una evasión, sino un sereno encuentro con la realidad.
3. Recuerda que sólo hay un momento importante: el ahora. El presente es el único momento del que disponemos.
4. La persona más importante es siempre aquella con la que estás, la que tienes ante ti, ya que ¿quién sabe si podrás relacionarte con cualquier otra en el futuro? La tarea más importante es hacer que la persona que está junto a ti sea feliz, éste es el cometido de la vida».
5. ¿Cómo voy a practicar el ser plenamente consciente? Mi respuesta es la siguiente: concéntrate en tu trabajo, mantente atento y listo para afrontar con destreza e inteligencia cualquier situación que surja: la plena conciencia es simplemente eso.
6. Si eres incapaz de controlarte y te dejas llevar por la impaciencia o la ira, entonces tu trabajo deja de tener valor.
7. Para ser consciente debes saber respirar, porque la respiración es una herramienta natural y sumamente eficaz para evitar que tu mente se distraiga. La respiración es el puente que conecta la vida a la conciencia, que une tu cuerpo con tus pensamientos. Siempre que tu mente se distraiga, utiliza la respiración para volver a ser consciente de ella.
8. Controlar la respiración es controlar el cuerpo y la mente. Cada vez que descubras que te has distraído y te cueste recuperar el control, a pesar de haberlo intentado de distintas formas, utiliza siempre el método de observar la respiración.
9. En cuanto te sientes a meditar, empieza a observar tu respiración. Respira al principio con normalidad y ve haciéndolo después poco a poco con más lentitud hasta que la respiración sea silenciosa, regular y bastante larga.
Meditación para jóvenes o simplemente atención plena
A los jóvenes les digo meditar una hora cada día es muy bueno para ellos, pero que no basta, que es muchísimo mejor practicar la meditación mientras andan, permanecen de pie, están tumbados, sentados y trabajando, mientras se lavan las manos, lavan los platos, barren el suelo, se toman una taza de té, conversan con los amigos o sea lo que sea lo que estén haciendo.
«Mientras laváis los platos, tal vez estéis pensando en el té que os tomaréis después e intentéis sacároslos de encima lo antes posible para sentaros y poder tomar el té. Pero esto significa que sois incapaces de vivir durante el rato que estáis lavando los platos. Cuando lavéis los platos, lavarlos ha de ser lo más importante para vosotros en la vida. Al igual que cuando tomáis el té, que también ha de ser lo más importante de vuestra vida. Cuando estéis en el lavabo, dejad que esa actividad sea lo más importante en ese momento en vuestra vida.»
Y con todas las otras cosas también debemos hacer lo mismo. Cortar leña es una meditación. Llevar cubos de agua es una meditación. Sé plenamente consciente las veinticuatro horas del día y no sólo durante la hora que te dedicas a meditar formalmente, a leer un texto sagrado y a recitar oraciones.
10. Ejecuta cada acto con plena atención.
El guijarro
¿Cómo te ayuda la imagen del guijarro? Siéntate en la postura que prefieras, en la del loto o en la del medio loto, con la espalda derecha, y esboza una ligera sonrisa. Respira lenta y profundamente, siguiendo cada movimiento respiratorio y volviéndote una unidad con la respiración. No te apegues a nada. Imagina que eres un guijarro que han arrojado a un río.
La piedrecita se hunde en el agua sin el menor esfuerzo. Sin apegarse a nada, va cayendo directamente hasta llegar al fondo, el punto de perfecta quietud. Tú eres como un guijarro que se ha dejado caer al río, sin apegarse a nada. No necesitas saber el tiempo que tardas para llegar a ese punto de absoluta quietud que se encuentra debajo del agua, en el lecho del río cubierto de fina arena.
Cuando te sientas tan descansando como un guijarro que ha llegado al lecho del río, es cuando empezarás a descansar de verdad. Una vez en este lugar, ya no hay nada que pueda tirar de ti ni arrastrarte. Si mientras meditas sentado no gozas de paz, en ese caso el mismo futuro sólo pasará por tu lado como un río, no podrás retenerlo, serás incapaz de vivirlo cuando se haya convertido en presente.
En esta hora en la que estás sentado meditando es cuando puedes alcanzar la alegría y la paz. Si no puedes encontrarlas en ella, no las encontrarás en ningún otro lugar. No corras tras tus pensamientos como una sombra que no se despega de su objeto. No los persigas. Encuentra la alegría y la paz en este preciso instante.
Entrevista con Thich Naht Hahn
Aquí puedes ver un extracto de la entrevista de 2010 de Oprah Winfrey le hizoa Thich Naht Hahn:
Entradas relacionadas:
Meditación Guiada Gratuita para principiantes